Inicio Investigación Quieren desarrollar en San Luis un instituto nacional para domesticar aromáticas nativas

Quieren desarrollar en San Luis un instituto nacional para domesticar aromáticas nativas

El coordinador del Programa Nacional de Hortalizas, Flores, Aromáticas y Medicinales del INTA e investigador del Conicet, Claudio Galmarini, le dijo a El Semiárido en Concarán que apoya personalmente el desarrollo en el norte de San Luis de actividades de investigación, pero en especial en la domesticación de plantas aromáticas nativas con destino a la producción comercial.

El instituto del INTA que se dedica a estas tareas está en Castelar, recordó el especialista: “Tenemos mucho mayor recorrido en domesticación de plantas nativas con valor ornamental que en las aromáticas; lo pendiente es dónde formamos recursos humanos en plantas aromáticas”.

Galmarini habló ante más de 20 profesionales que participaron de un taller convocado por la agencia INTA de Concarán y en el que el director de la Regional La Pampa-San Luis, Roberto Torrado, reiteró que hay una decisión política y estratégica del INTA, con acuerdo de los programas nacionales,  de que se establezca en esta región un instituto con la participación de todas las instituciones posibles.

A nivel nacional, el INTA tiene dos estructuras. Una es la tradicional, que la integran las regionales, unidades experimentales y sus agencias de extensión, que son los que llevan la mayor responsabilidad de todas las actividades, sobre todo en el día a día, graficó Gamarini.

Y la línea programática, que en este caso le toca coordinar el Programa de Hortalizas, Flores y Aromáticas, que “tiene un compromiso de mirada nacional sobre los problemas; es un instrumento en los que tenemos que ver la innovación, la gestión del conocimiento con una mirada prospectiva y ayudar a los centros regionales y a quienes nos convoque para que apoyemos con esa perspectiva”.

Son proyectos nacionales y al ser el INTA una institución bien repartida en todos los lugares, ve por ejemplo si Córdoba estuviera muy divorciada de lo que hace el centro regional San Luis y hacen cosas parecidas, poniendo la misma cantidad de recursos hacia iguales temas, advertiría una falla desde el punto de vista institucional: “Nuestra mirada es ver dónde se pueden alojar los recursos humanos  para compartir conocimientos y lo que se hace en una institución nacional”.

A este programa de Hortalizas, Flores y Aromáticas se sumaron las medicinales, por lo tanto es un programa muy diverso  en cuanto a los que trabajan en él, que lo hacen con sistemas complejos como los extensivos en el norte con poroto, hasta cultivos muy intensivos realizados en invernaderos y alta tecnología, como las flores.

Lo que está escrito como contexto en el programa que dirige Galmarini fue sintetizado de la siguiente manera:

– Hay en Argentina una gran diversidad en la producción de aromáticas y medicinales.

– Se importa mucho más de lo que se exporta. Argentina es un país netamente importador de plantas aromáticas.

– La producción local está concentrada para el mercado interno.

– Hoy hay cultivadas 6.000 hectáreas, con 3.000 productores y mano de obra intensiva.

– El consumo interno  es de 1.500 toneladas al año de aromáticas y medicinales nativas.

– Es sustento económico familiar de muchos recolectores.

– Hay peligro de extinción de varias especies.

– Tiene importancia en las economías regionales.

– Para algunos productos aromáticos hay exigente exportación.

– Argentina tiene oportunidades con germoplasma nativo.

– Muy mala organización sectorial: relación entre acopiadores y  recolectores.

– Falta de mano de obra en actividades intensivas y de recursos humanos capacitados en el sector.

Problemas y oportunidades

Los problemas y oportunidades son comunes en las hortalizas flores y aromáticas, describió el investigador: falta de diversificación, problemas de innocuidad, brecha tecnológica; pérdidas por cosecha, almacenaje y logística; un aprovechamiento de los recursos genéticos nativos no bien organizado; mal organizado el sector y presiones por el cambio climático en especial sobre la horticultura por el riego.

El avance de la población urbana sobre zonas con plantas aromáticas nativas se ve muy claro en esta zona del Valle del Conlara, advirtió Galmarini: “Este problema es serio para las aromáticas nativas porque se vincula con la sustentabilidad ambiental”.

El programa sostiene que hay que agregar valor y diferenciar producto. Pero también bregó por hacer cumplir las normas de calidad del proceso: “Hay buenas prácticas muy bien escritas y a veces mal implementadas, que no aseguran nada, porque cuando uno compra en una herboristería quiere saber primero si es inocuo, porque que sea natural no quiere decir que no tenga riesgo”.

La formación de “masa crítica” es otra estrategia del programa y que fue parte del sentido de la reunión en Concarán, según opinó y sostuvo que entre los profesionales asistentes al taller  puede haber  un núcleo para formar “masa crítica” en esta temática.

FOTO: Lucía Cornejo, INTA San Luis