Manuel Gontero Fourcade, licenciado en Ciencias Biológicas de la Universidad Nacional de los Comechingones, fue uno de los disertantes en la Feria de Intercambio de Chivos que se realizó el sábado 23 de noviembre en el Bajo de Véliz. Su exposición sobre las características, las costumbres y los movimientos territoriales del puma captaron la atención de los presentes. El Semiárido solicitó al profesional un escrito que resumiera su charla para poder compartir con los lectores. El profesional, a quien agradecemos, nos envió esta síntesis, que reproducimos a continuación:
Desde que se sumó al ecosistema serrano una nueva especie de mamífero artiodáctilo de la subfamilia Caprinae la cual fue domesticada alrededor del octavo milenio antes de Cristo, sobre todo por su carne y leche, la cabra, chivo, cabrito o como los científicos la llaman Capra aegagrus hircus se convirtió en un animal más de la red trófica de los ecosistemas serranos, al igual que el pecarí, la liebre, la corzuela o comúnmente llamada sacha cabra. asimismo estos organismos sólo son una pequeña parte de las miles de interacciones tróficas que existen en los ecosistemas. Podríamos sumarles carnívoros, aves, roedores, reptiles, anfibios, peces, una infinidad de insectos e invertebrados y, obviamente, los productos primarios como plantas y algas, que sin ellos no existiría ningún otro tipo de vida. Todos estos organismos forman parte del equilibrio de un ecosistema, cada uno cumple una función específica, determinada y esencial para mantener los ecosistemas vivos y funcionales. La pérdida de uno de ellos puede traer consecuencias inimaginables para el ecosistema.
Y el puma, ¿qué función cumple? Tal vez tenga una de las tareas más difíciles: debe regular las poblaciones de aquellos individuos que por sus características tienden a ser muchos y consumir grandes cantidades de alimentos vegetales, pero esta tarea no siempre es bien vista.
Hablemos un poco más sobre las características del puma, es una especie de félido americano de amplia distribución, se lo encuentra desde Canadá hasta el estrecho de Magallanes, en Argentina. Científicamente llamado Puma concolor debido a la uniformidad en la coloración de su pelaje, se identifican varias subespecies pero para la región serrana tenemos solamente a Puma concolo cabrerae. Puede pesar de 40 a 120 Kg dependiendo del sexo y de la edad y mide aproximadamente 1,90 m desde el hocico hasta la punta de la cola. Dentro de todos los felinos del mundo el puma tiene un 80% de eficacia de caza lo que lo convierte en el predador más temido de la región. Se alimenta de casi todo tipo de animales desde pequeños roedores hasta venados y vicuñas; en las serranías puntanas principalmente del venado más pequeño, la sacha y también del pecarí, pero no es un predador selectivo y siempre acecha aquellas presas que estén más disponibles o presenten menor dificultad a la hora de cazarlas. Esto último lo convierte en uno de los principales inconvenientes para los criadores de cabras de la región; sumado a que entre los meses de diciembre y abril las hembras de puma enseñan a sus crías a cazar, pudiendo generar grandes daños a los rebaños. Estas características innatas del puma lo colocan en el banquillo de los acusados cuando hablamos de productores de animales, y no sólo de caprinos, sino también de ganado vacuno, cría porcina, llamas y ovejas entre otros.
Pero el acceso a la información puede ayudarnos a resolver este aparente conflicto entre un predador exitoso y los productores de animales. Después de investigar y estudiar varios proyectos de reducción y mitigación del conflicto y proyectos de manejo, como también estudios sobre hábitos y costumbres de puma y los criadores, podría contarles que en todas las referencias se pueden observar algunas situaciones de parte de los productores que involuntariamente propician que el puma genere daños.
Podemos enumerar algunas características de la cría caprina que auspician problemáticas. En primer lugar la cría caprina no es exclusivamente en corrales. Estos se usan en algunas ocasiones. La mayor parte del tiempo está libre en el monte, en otras palabras expuestas a predadores. Otro factor es la falta de manejo diferenciado del rebaño, con esto me refiero a que no se tiene cuidados específicos para animales juveniles o enfermos que son más propensos a ser cazados por el puma. Desde esta perspectiva podemos sumar la falta de vigilancia por los cuidadores, falta de uso de perros pastores, falta de manejo en la entrada y salida de animales al corral, falta de conteo, falta de rastreo de grandes predadores, falta de infraestructura adecuada, etc.
Vale aclarar que estos datos e informaciones dependen de las realidades socioeconómicas de la región y que en muchos casos si bien las intenciones de los productores son realizarlas, se ven imposibilitados por las falta de recursos. Digo esto porque a la hora de pensar o planificar soluciones que mitiguen la problemática debe pensarse siempre las realidades particulares de cada productor.
Desde mi punto de vista como biólogo, intentaré hablar de algunas estrategias posibles que podrían mejorar o evitar que el puma se trasforme en el principal culpable de las pérdidas en la producción caprina.
Existe actualmente una tendencia a la utilización de perros pastores a cargo del cuidado del rebaño, estos no son perros cualquiera, son animales que desde que nacen son criados y amamantados por las cabras, viven en los corrales, se alimentan con las cabras y están exclusivamente en función del rebaño. Generalmente son perros medianos que se mimetizan con el rebaño, y se encargan de percibir la presencia del puma con anterioridad y avisar o bien ahuyentar. Esta herramienta parece ser la más económica y funcional según algunos registros en Chile, Brasil y asimismo en Neuquén y Mendoza dentro de Argentina.
Otras estrategias que puede minimizar el problema son instalaciones de luces en los corrales, corrales que impidan la entrada de cualquier predador, manejo diferenciado del rebaño, cuidados intensivos por parte del productor, entre otras soluciones; pero estos en la mayoría de las veces resultan costosos y demandan mucho tiempo de parte de los productores.
Todas estas estrategias a veces son insuficientes sobre todo en el caso de las masacres, momentos en los cuales el puma mata más individuos de los que es capaz de comer. Este es un caso concreto, que se repite en varios productores de la región y usualmente suceden todos los años. Aquí estamos frente a una problemática mayor que en la mayoría de los casos es casi imposible solucionar.
Si bien no puedo ofrecer desde mi profesión una solución específica, sí puedo decirles que entender el ciclo biológico y comportamental del puma puede ayudar. Existen registros de que este tipo de ataques se dan por motivo de que la madre puma entrena a sus cachorros, generalmente 2 ó 3, que en su instinto de aprender y convertirse en adultos independientes, son capaces de masacrar literalmente un rebaño entero de cabras. Entonces y siendo repetitivo, si durante los meses de diciembre a abril, fechas de entrenamiento de los cachorros, extremamos los cuidados de nuestro rebaño seguramente podríamos disminuir este tipo de ataques.
Finalizando quiero mencionar que el puma se caracteriza por ser un organismo plástico, capaz de comer gran variedad de presas, que se adapta a casi todo tipo de hábitat, que no está en peligro ni amenazado y sabiendo además que es un animal territorial que vive individualmente en su territorio pudiendo llegar a más de 100 km2 , siempre estará presente. Si usted como productor en su afán de defender su rebaño, matan al puma, o lo cazan o lo capturan, lo único que está logrando es dejar ese hábitat vacío para que otro puma lo use nuevamente. Al matar al puma sólo están aumentando las probabilidades de otro puma o mismo los hijos de aquél que mataron, ocupen ese lugar y vuelva a atacar su producción.
Todos los ecosistemas tienen sus redes tróficas y su correcto funcionamiento. depende de que todos los actores estén en funcionamiento y si protegemos los ecosistemas y sus organismos, evitaremos que los pumas se acerquen a nuestros rebaños y se mantengan entretenidos cazando sus presas naturales.
