El plan es considerado por las autoridades como «una oportunidad de crecimiento que apunta a mitigar el problema ambiental en la zona, generando un modelo de producción, industrialización y comercialización de alfalfa en San Luis».
Los pequeños productores de la Cuenca del Morro son protagonistas en un ambicioso proyecto que apunta a mitigar la degradación que padece una zona de casi un millón de hectáreas, como consecuencia del nacimiento del caótico Río Nuevo.
El primer paso se dio este martes en un establecimiento de la Colonia Los Manantiales, en Villa Mercedes, donde 24 productores de la zona recibieron, de parte del Ministerio de Medio Ambiente, Campo y Producción, unos 5.000 kilos de semillas de alfalfa certificada para sembrar en sus campos, lo que servirá para cubrir más de 400 hectáreas.
“Es el inicio de un enorme proyecto que busca, primero, hacer frente a la problemática ambiental y, después, impulsar el crecimiento de los productores a partir de la comercialización de la alfalfa”, indicó el titular de la cartera provincial, Sergio Freixes, y recordó: “Esta pastura se caracteriza por ser perenne y por absorber gran cantidad de agua, justamente lo que necesita el terreno afectado por el desbalance hídrico”.
Por su parte, el gerente general de Sol Puntano, Sebastián Lavandeira, indicó: “Los pequeños productores son parte fundamental de este proyecto. Es una gran oportunidad para todos y tenemos que acompañarnos en este camino”. A su vez, explicó: “El Gobierno entrega semillas para que inicien la siembra de 20 hectáreas por productor (unas 400 en total), pero el objetivo es abarcar 20 mil hectáreas”.
Y reflexionó: “San Luis tiene toda la potencialidad para iniciar un modelo de producción, industrialización y exportación a través de la Zona de Actividades Logísticas (ZAL). Por supuesto que necesitamos un volumen mucho más grande, pero este es el nacimiento de un gran comercio de alfalfa desde la Cuenca del Morro”.
Gonzalo Daniel Pollo, dueño del establecimiento sede, se mostró confiado con este proyecto: “El Gobierno siempre piensa en los que menos tienen. Es algo que cuidaremos mucho porque, por nuestra condición de pequeños productores, nos cuesta acceder a estos beneficios. Esta pastura ayudará mucho a disminuir las napas freáticas, alimentar nuestros animales, fertilizar la tierra y, más adelante, a comercializar la alfalfa”.
Fuente y fotos: Prensa Ministerio de Medio Ambiente, Campo y Producción.
