La comunidad productiva y profesional del norte de San Luis celebró el primer paso dado finalmente y después de nueve años de trámites, para concretar el proyecto del futuro Centro Interinstitucional de Desarrollo Estratégico Regional (CIDER) y cuya piedra fundamental fue colocada anteayer en Quines.
Intervienen en este proyecto el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet), el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) y la Universidad Nacional de San Luis (UNSL).
La obra, que se levantará con una inversión estatal de dos millones de dólares, ya tiene plazos, al menos expresados en los discursos por funcionarios nacionales que llegaron a San Luis: la primera etapa se termina en mayo y la segunda y final, a fines de 2018.
El acto, organizado por la UNSL, puso como figuras destacadas al momento de descubrir la placa al presidente del Conicet, Alejandro Ceccatto; al director del INTA San Luis, Javier Genovés; a la directora del INTI San Luis, Mirta Possetto, y por el Senasa, a Daniela Salazar.
El rector de la UNSL, Félix Nieto Quintas, agradeció a la familia Aguirre por la donación de las cinco hectáreas donde levantarán el CIDER y animó a las entidades de que forman parte del proyecto a trabajar con las fuerzas vivas de la zona.
Sin embargo, con la excepción del intendente de Qunes, Oscar Macías, hubo ausencias notorias, como los municipios de Candelaria, Luján y San Francisco, comunidades integradas al entusiasmo que mantuvieron vivo por varios años los inspiradores de esta idea, como el Consejo Local Asesor (CLA) del INTA Quines y la Agencia de Extensión Rural de la entidad, también omitidos en la reseña de la UNSL.
Además, estuvieron, aunque no nombrados, el director del Centro Regional La Pampa-San Luis del INTA el presidente del Consejo Regional de la entidad.
De todos modos, Ceccatto expresó: “Esto es el inicio de una concreción incipiente de algo que comenzó en el 2010 y que tuvo continuidad gracias a una actitud responsable y seria de los promotores iniciales y de todas las autoridades que siguieron después, entendiendo que es un camino real para el desarrollo más equitativo y federal de todo el país”.
El futuro centro tecnológico de Quines estará orientado a incorporar al sector socio productivo a la economía de la región y trabajará en temáticas agroalimentarias, de sustitución de la matriz energética e investigación de los recursos hídricos de la zona.
El desafío que queda para esta nueva institución será crear un consejo asesor ampliado para rendirle cuentas a la sociedad y designar al futuro gerente, cuyos posibles nombres aún no se conocen.
La falta de ritmo en la tramitación de este proyecto fue aludida por el ex director de la Regional del INTA Dominic Thornton como una «debilidad institucional».
Llegó el momento de imprimirle más acción.Después de todo, son empleados del Estado.
Fotos: Prensa UNSL.