Personal del Ministerio de Medio Ambiente, Campo y Producción continúa con la plantación de árboles en las zonas afectadas por el desbalance hídrico de la Cuenca del Morro que ya afectó a más de 200 mil hectáreas. Las acciones se desarrollan en puntos específicos de la Autopista Provincial N° 55, donde se foresta con especies de cortaderas, álamos, aguaribay y laurel en flor. El objetivo es frenar el escurrimiento y evitar el estancamiento de agua.
Las diferentes acciones oficiales en la Cuenca del Morro buscan alcanzar el balance hídrico en la zona. Por ello, operarios del Programa Forestal y Frutihortícola se encuentra desarrollando un intenso trabajo de forestación en la Autopista Provincial N° 55.
Recientemente fue sancionada una ley provincial que declara la emergencia ambiental para 200 mil hectáreas de la Cuenca del Morro, severamente afectada por la errática circulación del Río Nuevo.
El objetivo de la ley, que tiene al Ministerio de Medio Ambiente, Campo y Producción como su autoridad de aplicación, es darle curso inmediato a diferentes acciones de mitigación y detección de los procesos de erosión, agotamiento, degradación y desbalances hídricos del suelo de la cuenca como así también en sus áreas de influencia.
La semana pasada comenzaron las tareas de plantación con cortaderas en gaviones y cunetas de la autopista. También se inició la forestación en las pendientes, una tarea que se realiza con especies de álamos y aguaribay, que poseen raíces con gran capacidad de absorción que ayudarán a impedir el escurrimiento y estancamiento del agua, con menor ritmo del aumento hídrico de las napas, según las proyecciones técnicas del gobierno.
Para ello, se dividió el área en cinco puntos donde se encuentran las pendientes más pronunciadas para proceder a su forestación por etapas. La semana pasada se forestó el primero de los puntos propuestos, mientras que este jueves se forestará el segundo y el tercero, descendiendo desde la Cuenca alta hacia la media.
Además, en los canteros centrales del trazado se plantaron laureles en flor que ayudan a frenar el escurrimiento de agua y, al mismo tiempo, embellecen el camino para quienes lo transitan.
FOTO: Prensa-Ministerio de Medio Ambiente, Campo y Producción.