Con la fuerte suba en el tipo de cambio las miradas vuelven a estar sobre el ritmo de liquidación de divisas de la exportación.
En medio de la incertidumbre en la plaza financiera local tras el sorpresivo resultado de elecciones, se volvió a poner la mira sobre el ingreso de divisas del sector exportador.
Ayer hubo un encuentro entre las empresas del sector agroindustrial, principal fuente de dólares para la economía nacional, con representantes del Gobierno, en medio de lo cual comenzó a circular el rumor de un incremento en la alícuota de retenciones, que impactó sobre el precio de la soja pero que luego fue desmentido desde el Gobierno.
En el mercado de granos local las operaciones se paralizaron a la espera de nuevas señales, estableciendo un marco que se combinó con la creciente volatilidad local e internacional. Bajo este escenario, luego de las PASO, los planes de siembra comenzaron a cambiar y no se descarta un traslado de la superficie que inicialmente iba a maíz hacia la soja, con un planteo más defensivo.
La evolución del ingreso de divisas
En el encuentro entre representantes de la Cámara de la lndustria Aceitera de la República Argentina (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC) con el Gobierno se habría tratado el ingreso de divisas que realiza el sector, cuya evolución repasamos a continuación.
Actualmente CIARA-CEC informa de manera mensual la liquidación de divisas, que según explican está fundamentalmente relacionada con la compra de granos que luego serán exportados ya sea en su mismo estado o como productos procesados, luego de una transformación industrial.
Es decir, tiene que ver con el ritmo de ventas de los productores, pero no con mucho margen de especulación, ya que deben pagar las compras de granos que realizan para exportar o procesar.
La liquidación de divisas de CIARA-CEC alcanzó actualmente un volumen de US$ 12.973 millones hasta julio, cuando hace un año el monto era de US$ 13.661 hasta julio.
Hay que remontarse 10 años atrás para encontrar un volumen de liquidación menor al actual. Un año que estuvo afectado por la fuerte sequía del ciclo 2008/09.
CIARA-CEC también relaciona la menor liquidación con la tendencia a la primarización que «detonaron las medidas adoptadas por el Gobierno el año pasado».
«Además de eliminar el diferencial arancelario para promover la exportación de valor agregado local y empleo doméstico, se consideró a los subproductos industrializados de la soja como si fueran productos primarios, a diferencia del resto de los demás granos», destacan.
Según indican, el equema actual promueve la exportación de poroto sin procesar, que se combina con una mayor demanda de China por la guerra comercial con Estados Unidos, su principal proveedor.
¿Es retención?
La pregunta es, ¿cómo puede ser que con una cosecha récord haya menos dólares del campo?. Lo cierto es que los precios internacionales cayeron mucho, tanto por la guerra comercial entre Estados Unidos y China (que afecta directamente a todo el complejo oleaginoso), como así también una gran cosecha a nivel global y la fiebre porcina.
Los valores habían comenzado a recuperar terreno por los problemas productivos en Estados Unidos, pero el USDA en las últimas semanas se encargó de alejar esta posibilidad.
Es importante destacar que los productores no son los que liquidan los dólares, sino que venden la producción y reciben pesos al tipo de cambio comprador mayorista del Banco Nación. Además, al venir de una sequía histórica, en muchos casos no hay otra opción que vender para afrontar gastos, teniendo en cuenta también el alto costo de financiamiento.
Ahora, con el contexto de incertidumbre, las operaciones en el mercado de granos local se frenaron a la espera de nuevas señales que permitan comenzar a concretar nuevos negocios.
En el caso de la soja, los datos oficiales muestran que la industria y la exportación llevan compradas algo más de 31 millones de toneladas de la cosecha de la campaña 2018/19, contra 27 millones a la misma altura de la campaña anterior. De este total, apenas 17 millones de toneladas ya tienen el precio fijado, contra una cosecha de 56 millones de toneladas.
Fuente: Agrofy News
