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Valle del Conlara: cultivos de cobertura para controlar malezas y bajar el impacto ambiental

Los cultivos de cobertura (CC) controlan las malezas por competencia, forman una barrera a la entrada de luz, regulan la temperatura del suelo y con ello impiden la amplitud que favorece la emergencia y producen efectos alelopáticos (influyen en el crecimiento, supervivencia o reproducción de otros organismos).

Estas virtudes se suman al control de la erosión, secuestro de nutrientes, provisión de nitrógeno, producción de forraje y control de malezas. Así lo destacó el especialista del INTA San Luis Jorge Garay cuando expuso en la reciente jornada con más de cien asistentes desarrollada en el establecimiento “Dos Andrés”, de propiedad del asesor, docente e investigador Marcelo Bongiovanni, titulada “Hacia una agricultura adaptativa y sustentable en el Valle del Conlara”, organizada por  INTA San Luis junto a la Facultad de Agronomía de la UNSL, el grupo CREA del Valle de Conlara, y con la adhesión el CIAPA y la empresa Grande Aviones SA.

 El especialista habló sobre los cultivos de cobertura y su efecto en el control de malezas , «como una forma de disminuir el impacto sobre el ambiente», que, según describió, el continuo uso del mismo herbicida postemergente, como el glifosato, y otro preemergebnte, como el metsulfurón, aumentó las especies de malezas difíciles de controlar.

Dijo que este panorama se agravó por falta de rotaciones de cultivos y además por la ausencia de cultivos invernales de cobertura, pero también porque se dejaron de usar herbicidas residuales que tenían efecto tanto en malezas gramíneas como latifoliadas.

«Hoy tenemos que hablar de malezas tolerantes y resistentes, varias presentes en nuestros lotes», destacó Garay al explicar que las primeras son las que ya no son controladas por herbicidas, y las segundas son producto de la selección que hace la maleza ante el uso reiterado del herbicida: «La presenta de malezas resistentes a glifosato es un problema que preocupa cada vez más a productores y profesionales asesores de todo San Luis».

Advirtió que hay malezas que si no son bien controladas, producen merma en el rendimiento de cultivos agrícolas aumentan notablemente los costos para frenarlas, tales como yuyo colorado, rama negra, flor de Santa Lucía, siempre viva, pata de ganso, capín, sorgo de Alepo y cortadera chica.

Costos económicos y ambientales

Para Garay, en un escenario sin malezas resistentes, por ejemplo, para el cultivo de soja en San Luis se realizan tres aplicaciones  anuales, que suman 7 litros de herbicidas aplicados por hectárea, a un costo de 60 dólares por hectárea. En cambio, si hay malezas resistentes y tolerantes  se aplicarán 11,6 litros de herbicidas por hectárea, a un costo de 150 dólares por hectárea.

Sin embargo, el especialista del INTA advirtió que esto no sólo aumenta costos, sino que además repercute en el medio ambiente, ocasionando en algunos casos contaminación del suelo, aire y agua, aunque aclaró que en hoy este problema se está revirtiendo «pero no en la medida deseada».

Por ello insistió la eliminación y el control de malezas  aumenta al incrementar la producción de materia seca (MS) del CC y recordó que hoy se debe hablar de «manejo integrado» de malezas, que contempla el uso de todos los métodos posibles para controlar, como control cultura, mecánico, genético CC, conocimiento de la dinámica de emergencias de las malezas, controles químicos oportunos, rotación de cultivos y herbicidas, entre otros.

Estudios técnicos en San Luis

En la Estación Experimental Agropecuaria del INTA San Luis, un grupo de profesionales  en diferentes sitios de la provincia, realizó estudios para evaluar los efectos de los CC en el control de malezas y paralelamente el Con de Impacto Ambiental para comparar diferentes estrategias de manejo de malezas.

Garay destacó que en base a esos experimentos, se destacan a sembrar las variedades de centeno por su producción de materia seca, comparadas con trigo, triticale y cebada, aunque estas últimas, dijo, controlan bien las malezas.

Fotos: Prensa INTA San Luis.