El nuevo presidente de la sociedad estatal San Luis Agua, Hugo Guzmán Durán, recibió a El Semiárido y trazó un panorama de cómo será su gestión, entre las que destacó que mantendrá el ritmo del cumplimiento del Plan Maestro proyectado hasta 2025. Dijo que la actividad agropecuaria sigue creciendo en la provincia y que el gobierno acompañará ese desarrollo. El siguiente es el diálogo mantenido con este medio, en su primer contacto con la prensa:
– ¿Qué le pidió el gobernador al asumir?
Con los lineamientos que me dio el gobernador coincido plenamente, porque vengo de Infraestructura Hídrica y entendía qué era lo que se debía aplicar después de la ejecución de las obras en el aspecto como el manejo del agua cruda en San Luis, de su control, cuidado y de entender que estamos en una zona semiárida y que el agua es un bien escaso y que hoy debe alcanzar para todos.
San Luis es muy previsor. El Plan Maestro del Agua nos permite saber que no improvisamos y hay previsibilidad en el tiempo. Todas las obras no son para ya, sino pensando en el crecimiento de la provincia y cubrir la respectiva demanda.
He participado en la planificación y construcción de la mayoría de las obras hídricas y acueductos de la provincia, incluso el Plan Hepatitis Cero con el que se hicieron cloacas en casi todas las localidades.
-¿Hay problemas todavía para romper esa cultura de no pagar el gua cuando tiene un uso comercial en el sector productivo, por ejemplo?
Esa pregunta me la hice siempre. Hoy, con los análisis a los que tengo acceso me encuentro con que aumentaron los ingresos a San Luis Agua provenientes de ese sector, pero esto no es algo que no se logra de un día para es otro. Es una política similar a cuando educamos a los niños con el cuidado del agua; al productor hay que señalarle cuál es la política de estado sobre el uso responsable y sustentable del recurso y generar acciones en conjunto para el campo en ese sentido.
– Trabajar sobre cambios de actitudes del productor no parece ser una tarea fácil.
Somos una provincia con pocos habitantes y una infraestructura que se está modernizando. La actividad agropecuaria está creciendo y debemos acompañarla desde San Luis Agua porque esos nuevos emprendimientos deben tener un control y si lo hacemos desde el primer día nos facilita el trabajo. No con un criterio de cobrar el servicio, sino para que el agua se cuide porque hay mucha gente que trabaja para que el recurso llegue a los acueductos y a las plantas potabilizadoras de cada localidad.
– Los primeros acueductos permitieron incorporar varios miles de hectáreas para la ganadería y aumentar la carga animal. ¿Qué impacto esperan con los nuevos?
En el caso del Departamento San Martín no podemos medir aún el enorme crecimiento que generará el acueducto que el gobierno construyó. Conozco lugares donde el agua se buscaba a caballo y en camionetas con el combustible compartido entre vecinos. Hoy la red pasa por la puerta de los campos.
Cuando recorrí el Departamento Belgrano para la construcción del acueducto Nogolí, la gente estaba muy pesimista; decía que el agua nunca iba a llegar. Hoy los vecinos reclaman cuando se corta el flujo o no se terminan las plantas potabilizadoras en los parajes prometidos. Y esa actitud es buena, porque ya tomaron concienc ia del valor de este recuso, lo que los convierte en celosos custodios de la integridad del acueducto.
– ¿Qué valor le da a los estudios de la Huella Hídrica de San Luis que realizó el gobierno?
La Huella Hídrica de San Luis, un trabajo único en el país, que para concretarlo hubo que empezar de cero. Un montón de información que no existía hoy está disponible para cualquier persona en el sitio web sanluisagua.com.
Para el sector agropecuario, por ejemplo, brinda un indicador de consumo de agua utilizado para la producción de bienes y servicios agroindustriales de la provincia, que son tomados como base para el diseño de los próximos lineamientos de la política hídrica provincial.
Para disponer de una buena gestión y conservación de los recursos hídricos, el desarrollo de estos estudios resulta clave. Son herramientas que nos permiten alcanzar una mejor gestión de los recursos hídricos. Por eso, todos los esfuerzos e inversiones referidos a estudios e investigaciones hídricas, seguirán siendo uno de los pilares en la gestión de San Luis Agua.
– ¿Qué lugar le seguirá dando en su gestión al Congreso Mundial del Agua?
Tengo un especial pedido del gobernador Poggi para continuar con estos acontecimientos, que nos permiten mostrar al mundo las políticas a largo plazo que tiene San Luis y la inversión en infraestructura para el aprovechamiento y buen uso del agua, y a su vez escuchar a los referentes internacionales, esta vez de más de ocho países, entre ellos Brasil, Holanda, Reino Unido y Yemen, sobre las últimas experiencias y propuestas de vanguardia que lideran en el mundo.
También nos permite que toda la tecnología e ideas aplicadas en otros país buscar de adaptarlas a San Luis.
Habrá puntaje para los docentes que asistan al congreso. Con ello queremos que la información llegue a los chicos, que serán en el futuro los principales custodios del agua en la provincia.
Estos congresos siempre dejaron algo valioso para aplicar en San Luis. La Huella Hídrica en la provincia fue inspirada en un trabajo expuesto allí.
– ¿Qué planes hay con los diques?
Tenemos 19 diques y el gobernador me pidió que estimulemos las inversiones privadas y públicas vinculadas al turismo. Por supuesto que con el extremo cuidado ambiental de los peridiques.
El gobernador me encargó además que estudiemos hasta donde puede desarrollarse el turismo termal en Balde, San Jerónimo y otras zonas donde se cree que hay este tipo de agua. El recurso surge desde 600 metros de profundidad y a 43 grados centígrados durante todo el año. Pero no hay certezas de si su uso para consumo de los 500 habitantes de Balde y en las terapias termales que ofrecen al turismo los centros privados es sustentable. Por ello San Luis Agua será la encargada de realizar un monitoreo de pozo para la selección de acuífero de explotación.
El objeto de este estudio será determinar las características hidrológicas de los dos acuíferos encontrados en el lugar, y en base a los resultados obtenidos, proponer la forma de explotación más conveniente.