Volvieron los vientos del norte y reactivó la ola de calor en la mayor parte del área agrícola de San Luis, lo que causó precipitaciones de muy variada intensidad, con fuertes contrastes zonales.
Hacia mediados de la semana próxima se producirá el paso de un frente de viento Pampero que producirá algunas lluvias adicionales y aportará una masa de aire frío, que causará un marcado descenso térmico, según el último informe semanal de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA).
Estas condiciones llegarán el martes para toda la provincia, que registrará temperaturas mínimas entre 10 y 15°C.
El miércoles continuará la entrada de vientos del sur, manteniendo las temperaturas bajo lo normal, con marcas mínimas de entre 15 y 20°C y probables lluvias que no superarán los 10 milímetros.
Las lluvias de los últimos días beneficiaron a dos zonas netamente productivas ubicadas en la franja agrícola central de San Luis. Y llegaron en un momento en que los cultivos demandan grandes cantidades de agua para expresar su mejor potencial y rendimiento. Se trata de La Cumbre y La Punilla, que entre la madrugada del sábado y la tarde del domingo, registraron 58,53 y 57,88 milímetros respectivamente, según datos aportados por la Red de Estaciones Meteorológicas de la provincia (REM).
Enero se despide de la provincia dejando marcados contrastes climáticos y finalizada la campaña gruesa, que dejó implantadas 180.000 hectáreas con soja, 118.000 con maíz, 20.000 con girasol (con una pérdida reportada de 600 hectáreas) y 52.000 con sorgo granífero.