Un tibio y breve comunicado entregado el martes solamente a El Diario de la República mostró la despreocupación oficial por advertir a la población rural en especial sobre la presencia por primera vez en la provincia de una riesgosa enfermedad de los caballos detectada en el norte de la provincia.
Se trata de la anemia infecciosa equina, una enfermedad retroviral con signos clínicos agudos y crónicos que incluyen fiebre, anemia, edema y caquexia en algunos animales. No tiene cura y los infectados deben ir a faena.
Preocupado sólo por hacer propaganda de la eficiencia del Laboratorio del Campo, el jefe del Programa Producción Agropecuaria y Arraigo Rural, Martín Rodríguez, olvidó comunicar masivamente por la Agencia de Noticias del gobierno, como habitualmente lo hace, que entró a la provincia una enfermedad equina fácilmente contagiosa y que algunos de los animales portadores puede no presentar síntomas.
El pobre comunicado tampoco precisa el lugar ni las circunstancias en las que detectaron el caso, como tampoco la procedencia y actividad que desempeñaba el animal.
No es la primera vez que cierta forma de comunicar del gobierno despierta sospechas de que se quiere minimizar un problema sanitario. Hace algunos meses el portal Notinogo dio cuenta de que se ocultaron dos casos ocurridos en campos cercanos a la localidad de Nogolí con encefalitis equina y virus del Nilo.
De todos modos, en una complaciente entrevista, Rodríguez buscó despegarse del problema: “Es ahora responsabilidad del organismo nacional y del propietario enviar a faena al equino positivo y realizar un estudio retrospectivo epidemiológico que permita conocer la procedencia anterior o posibles movimientos recientes para evitar la transmisión a otros animales”.
El criterio selectivo para hacer masiva la información de interés público parece repetirse en esa área del Ministerio de Medio Ambiente, Campo y Producción, ya que recientemente ocurrió lo mismo con resoluciones del Senasa sensibles a San Luis.
La anemia infecciosa equina que apareció en el departamento Ayacucho se habría detectado el 16 de febrero cuando tomaron muestras de sangre de 34 equinos procedentes de la Agrupación Gaucha de Candelaria, que pertenecen a productores de Quines, El Tembleque, Baldecito, La Majada y Candelaria.
El 22 de mayo del año pasado, impulsado por el mismo funcionario que hoy conserva el cargo, San Luis declaró el alerta sanitario por 180 días a raíz de un brote de anemia infecciosa equina detectado en la localidad cordobesa de Labouaye.