De los bodegueros de la provincia de Mendoza que supimos conocer allá por los años 60 ó 70 del siglo anterior, cuyos apellidos llevaban el nombre de la bodega y, en consecuencia, del vino que envasaban, la lista se ha achicado considerablemente. O, dicho en otros términos, cambiaron de manos forzados por la realidad económica por la que transitamos en nuestro país.
Esta nota presenta detalles de los cambios vividos y se completa con la lista de las 20 bodegas que más exportan. La información fue publicada por el diario Los Andes, con la firma de Soledad González.
Hace un poco más de 50 años no se podía pensar la vitivinicultura, y a las grandes bodegas de Mendoza, sino de la mano de empresarios de nuestra región. Pero a la luz de las crisis cíclicas en la industria, esa foto cambió y cada vez son menos los bodegueros mendocinos que participan en los principales puestos de comercialización externa de vino.
Si se tiene como referencia que cada año más de 400 bodegas exportan vino en Argentina, lo cierto es que las primeras 20 exportadoras, tomando como base el promedio de los últimos 7 años según datos del INV, concentran el 72,5% del total facturado por exportaciones de vino fraccionado, principalmente botella.
Es allí donde cada vez son menos los mendocinos que tienen participación en el negocio de valor agregado, que es el fraccionado que se puede ver en las principales góndolas del mundo con la marca Argentina. Datos del INV muestran que del ranking de las 20 primeras, sólo 6 tienen como dueños a mendocinos: Bodegas Esmeralda (Nicolás Catena Zapata), La Agrícola (José Zuccardi), Leoncio Arizu (Alberto Arizu), Valentín Bianchi (Familia Bianchi), Dominio del Plata (Susana Balbo) y Fecovita (5.000 socios de sus cooperativas primarias).
Mendoza concentra la mayor cantidad de bodegas del país y también la de hectáreas implantadas. No obstante, a la hora de evaluar quiénes son los que manejan el negocio de la exportación, los mendocinos pierden. El cambio no ha sido de la noche a mañana y lleva décadas de baile al ritmo de los vaivenes económicos del país, que han dado por resultado que aquellos que comenzaron y conformaban esa casta bodeguera local hayan abandonado el negocio.
Los sobrevivientes
Sobrevivir en tiempos de crisis y en una industria que además tiene su dinámica propia, en algunos casos por más de 50 años, resulta notable en el país.
“La vida de una empresa en Argentina durante más de un siglo es un mérito muy grande ya que tenemos un país maravilloso pero que no nos hace las cosas fáciles”, reconoce Alberto Arizu, quien esta semana anunció la asociación de Luigi Bosca, la empresa que su bisabuelo fundó, con el fondo L Catterton.
Con un consumo per cápita de vino en franca caída desde hace décadas (ya se calcula que perforó el piso de los 19 litros), la salida exportadora ha sido una buena opción para mantener el negocio.
José Zuccardi recordó que entre 2002 y 2010 el vino argentino tuvo un crecimiento significativo en el mercado externo. “Durante esos años pudimos crecer mucho, pero el escenario cambió entre 2011 y 2017 por la pérdida de competitividad generada por el tipo de cambio y la inflación”, indicó.
“En ese período de baja competitividad, con mucho esfuerzo logramos mantener nuestras exportaciones estables. Ahora la economía ha vuelto a dar un giro y hay nuevos oportunidades de crecimiento”, remarcó el dueño de la bodega Familia Zuccardi.
Para Susana Balbo, que entró al negocio en 1999, la clave es la planificación: “Para mantenerse en el tiempo hay que tener un plan de negocios a prueba de crisis, en nuestro caso ha sido apostar a la exportación en muy alto porcentaje, más del 90%, y productos de muy alta calidad”.
Bodega Bianchi es una histórica bodega familiar y para ellos el esfuerzo y la austeridad permitieron la supervivencia a lo largo de los años: “La familia logró aprovechar una etapa de acumulación de capital importante que les permitió afianzar la bodega sin gran retiro de utilidades”, contó a Los Andes Armando Morón, presidente del directorio.
“En los momentos de ampliación, trabajamos con financiamiento bancario. Estamos siempre lanzando nuevos productos, con una buena estructura comercial y un buen flujo de fondos”, agregó.
¿Qué resta? Eduardo Sancho, presidente de Fecovita -que nuclea a 5.000 productores- explicó que el panorama del sector exportador difiere mucho según el producto: “Pese a la mejora del tipo de cambio, el escenario para el vino fraccionado es complicado.
Perdimos muchos mercados desde 2015 por la pérdida de competitividad y para recuperarlos hay que reconstruir una marca”.
“La mejora va a ser lenta. Es muy difícil, y más cuando se compite con países como Chile, que tiene acuerdos de libre comercio en la mayoría de nuestros mercados, mientras nosotros debemos pagar aranceles”, cerró.
Claves
465 bodegas exportadoras hay en el país.
U$S 558.600.000 es la media de exportaciones los últimos 7 años de las 20 principales bodegas.
72,5% del valor exportado representan las primeras 20 bodegas.
90% del valor exportado representan las 60 primeras bodegas y son el 12,9% de la cantidad de bodegas.
Quién es quién en el ranking exportador
Las 20 primeras exportadoras de vino fraccionado (2012- 2018, fuente INV)
Exportaciones de vino fraccionado, 20 primeras, de un promedio de 7 años (2012- 2018, fuente INV)
Grupo Peñaflor: Tiene ventas anuales por 511 millones de dólares. Comprende las bodegas Finca Las Moras, Trapiche, Mascota Vineyards, Navarro Correas. El Esteco, Suter, Santa Ana, San Telmo y La Rosa. A partir de 2010 la familia Bemberg adquirió la totalidad del paquete accionario del Grupo Peñaflor, quienes antes fueron dueños de la cervecería Quilmes.
Bodegas Esmeralda: forma parte del conjunto de empresas vitivinícolas que son propiedad del reconocido bodeguero mendocino Nicolás Catena Zapata, quien además tiene el manejo de las bodegas Catena Zapata, Escorihuela y Rutini, entre otras.
La Agrícola: Fue fundada 1963 por el Ing. Alberto Zuccardi quién comenzó a plantar viñedos en Maipú. Actualmente está al mando del mendocino José Alberto Zuccardi, que junto con sus tres hijos (Sebastian, Julia y Miguel) manejan dos bodegas: Santa Julia y Zuccardi Valle de Uco y una olivícola.
Trivento Bodegas y Viñedos: Forma parte del Grupo Concha y Toro, uno de los más grandes conglomerados vitivinícolas del mundo que tiene su base en Chile. Se instaló en la Argentina en 1996 con la compra del primer establecimiento y actualmente produce y comercializa bajo las marcas Trivento, Tocornal, Tribu, Reserva, Golden y Eolo, entre otras.
Bodegas Chandon: Forma parte del grupo internacional, Louis Vuitton Moët Hennessy (LVMH), que en Argentina tiene las bodegas: Chandon, Terrazas de los Andes y Cheval Blanc.
Bodega Norton: Desde 1989, cuando el empresario austriaco Gernot Langes-Swarovski, dueño del imperio del cristal, decidió invertir personalmente en nuestro país, forma parte de las inversiones del reconocido empresario. Desde hace varias décadas es llevada adelante por Michael Halstrick, miembro de la familia Swarovski.
Bodegas Salentein: Fundada en los años 90 por el holandés Mijndert Pon – quien falleció en 2014- en Tupungato. Mijndert Pont también construyó el Museo Killka, un espacio donde se exponen cuadros creados por artistas internacionales y nacionales reconocidos y fue pionero del enoturismo al inaugurar en 2001 Posada Salentein.
Viña Doña Paula: Forma parte del grupo Viña Santa Rita, fundada en 1880, en Chile. En 1997 el grupo decidió invertir en el exterior y formaron Viña Doña Paula en Argentina, negocio que en aquel momento también incluyó la adquisición de dos predios, uno en Ugarteche y otro en Tupungato.
Finca Flichman: forma parte del grupo portugués Sogrape, el cual maneja internacionalmente marcas como Offley, Quinta Dos Carvalhais, Morgadio da Torre, entre otros.
Leoncio Arizu: Esta semana anunció como socio estratégico al Fondo de inversión L Catterton, que en Argentina tiene el mando de las marcas, Caro Cuore, Rapsodia y Baby Cottons. La bodega sigue en manos de la familia fundadora, los Arizu, quienes son mendocinos.
Pernod Ricard: El Grupo francés Pernod Ricard nació en 1975 con la fusión de las principales empresas del sector de bebidas alcohólicas de Francia: Pernod Frères de París, fundada a principios del siglo XIX, y Société Ricard de Marselha. En Argentina tiene el manejo de las bodegas: Colon, Etchart, Graffignia, Santa Silvia, a lo que se suma un reconocido paquete de espirituosas como: Chivas, Ballantines, Beefeater, Havanna, Absolut, entre otras.
Molinos Río de la Plata: se trata del gigante de consumo masivo manejado por Perez Companc que en el negocio del vino tiene a Nieto Senetiner, el 50% de Viña Cobos y Ruca Malén, estas dos últimas fueron adquiridas en el año 2016.
Bodega Argento: Es propiedad de Alejando Bulgheroni, una de las fortunas más grandes de Argentina, quien maneja la empresa de energía Pan American Energy. Argento fue creada en 1999 por Bodegas Esmeralda, del empresario Nicolás Catena Zapata. En 2012 se vendió a Bulgheroni.
Valentín Bianchi: Fue fundada en 1928 en San Rafael. En actualidad sigue en manos de la familia fundadora de la bodega. Es una de las pocas que ha logrado este hito.
Dominio del Plata: En 1999, Susana Balbo, después de una vasta trayectoria en el mundo del vino puso en marcha su bodega: Susana Balbo Wines, en Luján de Cuyo. En la actualidad, la bodega es administrada de la mano de los hijos de la bodeguera –José y Ana-.
Finca La Celia: Si bien data de 1890, cuando Eugenio Bustos comenzó a construir la bodega luego de adquirir tierras en el próspero Valle de Uco. Fue en el año 2000, Viña San Pedro Tarapacá Wine Group, líder en el negocio de bebidas en Chile compró Finca La Celia y le dio el impulso que hoy tiene.
Bodegas y Viñedos Pascual Toso: Históricamente perteneció a la familia mendocina Toso, pero en los 90s fue adquirida por la familia Llorente con base en Buenos Aires que tiene importantes inversiones en la Pampa Húmeda. El grupo tiene como cabeza a Julio Santiago Llorente.
La Riojana Cooperativa Vitivinifrutícola de la Rioja Ltda.: La Riojana se fundó en Chilecito en 1940 como una ampliación de La Caroyense Cooperativa Vitivinícola de Córdoba y La Rioja Ltda. Nuclea en su seno a 412 productores vitivinícolas y olivícolas (alrededor del 80 % de la totalidad de los pequeños y medianos productores riojanos), y elabora más del 50 % de la producción total de uva de La Rioja.
Fecovita: Se conforma con la adquisición de la unidad de fraccionamiento y comercialización de la ex Bodegas y Viñedos Giol. Tiene 5000 productores asociados por medio de sus 29 cooperativas primarias en todo el territorio de la provincia. Si se tiene en cuenta el volumen comercializado total tanto en mercado interno como en el externo, se encuentran entre los 10 grupos vitivinícolas más importantes del mundo.
Kaiken S.A. Aurelio Montes, fundador de la Bodega Montes en Chile, llegó a Mendoza en el año 2000, y en 2001 a instalar su emprendimiento en la provincia, que hoy tiene un gran negocio exportador.
Fuente: Diario Los Andes