En medio de los ataques de Jair Bolsonaro contra el presidente electo Alberto Fernández, Brasil anunció la aplicación de una cuota de 750 mil toneladas de trigo para la importación sin aranceles por fuera del Mercosur. El hecho plantea fuertes dudas acerca del futuro del bloque regional.
Este jueves, el Ministerio de Agricultura brasileño dispuso la implementación de ese cupo por un período «indefinido», aunque todavía no se informó oficialmente cómo se hará, en un hecho que algunos interpretan como un nuevo ataque del presidente brasileño Bolsonaro por su enojo contra Alberto Fernández por haber ganado las elecciones en Argentina.
«Las importaciones de todos los países se beneficiarán, excepto las de los países con los que Brasil tiene un acuerdo comercial que establece el libre comercio del producto», señaló ese Ministerio.
Preocupación
En tanto, la medida fue recibida con preocupación por los exportadores de granos argentinos, quienes reclamaron al Gobierno que «actúe» para enfrentar la decisión del gigante continental.
El presidente de la Cámara de la Industria Aceitera, Gustavo Idígoras, dijo en declaraciones a la prensa que «si bien cada país del Mercosur tiene legalmente autorizado poner hasta 200 posiciones por semestre, debe demostrar incapacidad regional de suministro. En este caso eso no existe».
«Brasil necesita 5,5 millones de toneladas y la Argentina tiene sobre stock para venderle. De hecho, tuvimos un año de abastecimiento muy bueno. Por eso enviamos solicitudes a Cancillería y al Ministerio de Agricultura para que actúen sobre esta decisión», añadió el dirigente.
También, resaltó: «Pedimos que evalúen la legalidad de la decisión de Brasil porque no vemos que haya justificación y, además, pedimos que la cuota sea abierta para todos los países del mundo, incluyendo la Argentina».
«Es decir, Brasil si abre la cuota es para todos porque es una cuota OMC (de la Organización Mundial del Comercio)», enfatizó.
Según datos extraoficiales, la Argentina colocó en Brasil 5,1 millones de toneladas de trigo, y cubrió así el 83% de las necesidades de importación del vecino país. Cualquier trigo extra Mercosur que quiera entrar lo debe hacer con un arancel del 10%.
“Provocación”
Por su parte, Carlos Iannizzotto, titular de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria Limitada (CONINAGRO), afirmó sentirse “enojado y preocupado” por la situación. “Por cuestiones personales se pone en riesgo un acuerdo que hace rato venimos viendo cómo lo podemos potenciar”, lanzó en referencia al presidente de Brasil.
En este sentido, en diálogo con Radio Con Vos, Iannizzotto explicó que el “84% del trigo que importa Brasil proviene de Argentina” y que las 750 mil toneladas representan un 5%, un porcentaje que “desordena” al Mercosur.
“Creemos que esto es una cuestión de orden nacional e internacional, y el Gobierno tiene que reaccionar rápidamente ya que hay una violación manifiesta a normar internacionales con graves perjuicios a una alianza estratégica. Es una provocación”, destacó.
Por último, el empresario dijo que “están tirando las líneas para recibir las distintas informaciones y saber qué grado de avance tiene la noticia y cómo se está trabajando diplomáticamente”.
“Ya ha habido intentos así y a través de la diplomacia se logró disuadir la decisión de Brasil. Nosotros vamos a actuar con prudencia pero con firmeza”, concluyó.
Fuente: Ambito.com