El presidente de la Confederación Rural de San Luis (CRSL), Alejandro Casale, consideró que los gobiernos, antes de hablar de frigoríficos, “tenemos que empezar a hablar de seguridad jurídica, de buenas señales y de incentivo a los productores para que haya mayor stock ganadero”.
Durante una entrevista con El Semiárido, el dirigente ruralista y productor de Justo Daract analizó los complejos aspectos que rodean a la producción ganadera y las razones por las cuales la carne registra un importante aumento en el mostrador.
“Lo más importante es la inflación, la falta de señales claras y seguridad jurídica por parte de los gobiernos”, evaluó Casale en su análisis, cuyos conceptos más salientes son los siguientes:
“Cuando hablamos de la carne y su marcado aumento en los últimos meses en las góndolas, cabe analizar distintos factores por los cuales se registró este incremento.
Estamos en un momento en e que la producción ganadera, desde la cría, que es su comienzo; la recría donde el animal se desarrolla, y luego el engorde, que en un 75% se realiza en feedlot y que en su mayoría va a consumo interno.
Estamos hablando que los feedlot en este momento han recaído en su capacidad de producción a un 50%. Esto sucede por el alto costo del grano de maíz, que es su más importante insumo, que subió un 36% en este año a raíz de la suba de los precios internacionales, pero también y principalmente por la creciente inflación y aumento del dólar en nuestro país.
En nuestro país tenemos una dificultad con la inflación que es principalmente política-económica, ya que la señales no son claras, no hay seguridad jurídica, hay emisión monetaria y un cepo cambiario que genera una importante desconfianza.
Por esto es que el costo del engorde se hace muy caro.
Por otro lado, en la recría, el precio del ternero aumentó estrepitosamente en los últimos meses porque hay una demanda muy marcada de comprar la invernada para recriar y engordar, ya que el productor cuando vende su ganado gordo en pie terminado la única opción que tiene reinvertir en reposición. No existe otro tipo de inversión en otro sector y el cepo al dólar evita que se tenga liquidez.
Por eso ha crecido la demanda de terneros para reposición de invernada y esto hace que el precio haya aumentado y este precio también tracciona al valor del gordo. Cuando se vende un novillo gordo, se necesita 1,4 kilos por kilo de ternero.
Por otro lado, el consumo de carne en el país cayó a 48,6 kilos por habitante por año, uno de los más bajos de la historia y eso es por el bajo poder adquisitivo de la población.
Esto es consecuencia de la pandemia que generó una baja actividad económica y al haber tanta inflación, el poder adquisitivo no alcanza la suba de precios de los alimentos.
Por eso cuando escuchamos a los gobiernos hablar de los mercados ganaderos, de los frigoríficos y de los aumentos en la carne, por ahí lo hacen con mucha liviandad y no se explica bien lo que está atrás de estos procesos productivos, como es el alimento por excelencia de la Argentina que es la carne.
Particularmente acá en la provincia de San Luis hubo mucha sequía, cayó el stock ganadero en un número importante y también los feedlot se han reducido al 50% y por lo tanto no hay tanta oferta de carne y por eso aumenta el precio en la góndola.
Por otro lado, la demanda de carne para exportación a China es mu grande. China se lleva todos los cortes traseros y delanteros del animal y por esto es que generalmente el productor que está anotado para exportar se ve obligado a vender su hacienda exportable por los mejores precios y por ello cae el stock para consumo interno y esto hace que se paguen buenos valores en la carne y traccione a la góndola.
Pero lo más importante es la inflación, la falta de señales claras y seguridad jurídica por parte de los gobiernos.
Creo que antes de hablar de frigoríficos, tenemos que empezar a hablar de seguridad jurídica, de buenas señales, de incentivo a los productores para que haya mayor stock ganadero,
Otro factor que encarece el precio de la carne es la alta carga impositiva en los distintos niveles del Estado, nacional, provincial y municipal, que ronda en n 67% a nivel provincia de San Luis, lo cual explica en gran parte el costo de la carne y de la producción ganadera.
No solo ha subido el precio del maíz, que es el insumo más importante, sino también el de los alimentos balanceados que generalmente se rige en dólares; el aumento del gasoil y de distintos insumos que vienen en dólares también.
No vemos bien cuando el Estado busca regular precios o intenta participar de la producción metiéndose en el negocio, ya que el Estado solamente debe administrar y crear buenas condiciones para la inversión de los privados, que son los que entienden generalmente en la materia de cada producción y de cada empresa y negocio”.
