Las llamas habían trepado hacia la sierra y alejado de los centros urbanos, pero las modificaciones de las condiciones climáticas hicieron que se deban redoblar los esfuerzos para intentar prevenir la propagación. Se sumó un nuevo foco en la zona del Morro que pudo ser contenido.
De acuerdo a lo explicado por el jefe del Programa San Luis Solidario, Damian Gómez, se multiplican los esfuerzos tanto de los brigadistas como de Bomberos de la Policía y Voluntarios para establecer una estrategia que evite un frente extenso de fuego.
“Se dan tres focos, uno en Papagayos, otro de Villa Larca y hay otro en la zona del Morro, en el que brigadistas y bomberos han estado trabajando durante la madrugada. A este último lo han podido contener, pero ya hay un sector donde no se puede trabajar ya que es una zona muy difícil de acceder”, añadió.
El jueves a las 17 se registró un foco en la zona de Villa Larca, el que rápidamente se extendió por la región. El viernes por la madrugada con la caída de lluvia pudo dominarse parcialmente, pero ese día por la mañana se reavivó.
Durante todo el fin de semana se trabajó para dominar las llamas que comenzaron a moverse hacia el este, sobre la sierra, pero debido al cambio en los vientos ahora la situación se hizo compleja.
Ya se llevan 72 horas continuas en ese siniestro, pero desde el miércoles de la semana pasada se trabajan en grandes incendios, ya que se debió combatir con fuerza en Donovan, a pocos kilómetros de la ciudad de San Luis.
Fuente: ANSL – Prensa Ministerio de Seguridad.