En el marco del Programa SemillAR, que lleva adelante el Ministerio de Agricultura, Ganadería y pesca de la Nación a través de la Secretaría de Agricultura Familiar Campesina e Indígena (SAFCI), más de 600 representantes de la Agricultura Familiar Campesina e Indígena participan del curso sobre herramientas para la comercialización de semillas.
SemillAR se implementa de manera articulada con el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), el Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES), el Instituto Nacional de Semillas (INASE) y el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Nación.
«El objetivo del Programa es poner en valor a las semillas nativas y criollas que hace cientos de años están en manos de los agricultores familiares, de las guardianas y guardianes de las semillas y de la agricultura familiar, campesina e indígena», explicó Alberto Chiavarino, director de SemillAR. «Buscamos que las compañeras y compañeros cuenten en el Estado, con un lugar que les permita producir más y mejor, que todos puedan acceder a las semillas nativas y criollas con riesgo de perderse ante la disminución de la biodiversidad», amplió.
«La capacitación está destinada a organizaciones de la agricultura familiar y a los técnicos que las asisten, para consolidar sus organizaciones como cooperativas y fortalecerlas como comercializadoras de semillas, tanto en el sector privado como para ser proveedoras del Estado», explica Gustavo Tito, del INTA.
A partir de esta instancia de formación, técnicas y técnicos de la SAFCI, el INASE y el INTA, sumando a organizaciones de productoras y productores, pueden acceder a información actualizada y detallada sobre cómo constituir una cooperativa. También se abordan temas vinculados con los requisitos necesarios para dar cumplimiento a los aspectos formales, la vida institucional de una cooperativa, cuáles son sus órganos, sus autoridades y las obligaciones que surgen a partir del otorgamiento de la matrícula.
«Para el Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES) es estratégico poder impulsar la constitución de cooperativas para que los grupos de agricultoras y agricultores familiares se organicen», explicó la coordinadora de la Comisión Técnica de Agroalimentos del INAES, Luciana Soumoulou. Al tiempo que agregó: «se pretende que, a partir de esta institucionalidad, puedan mejorar sus oportunidades de acceso a la comercialización y a semillas criollas y nativas».
Estas acciones implican la promoción por parte del Estado de la economía social, solidaria, popular y su vínculo estrecho con la agricultura familiar como un actor estratégico en la producción de alimentos, garante de la soberanía alimentaria, del acceso a alimentos con precios justos y la sustentabilidad ambiental.
Los y las participantes de la capacitación pueden conocer los pasos sobre los trámites necesarios que se deben realizar ante el INASE. Se destaca que desde INAES se ha aprobado una figura cooperativa promovida por la SAFCI. «Este trabajo intenta dar respuesta a un planteo de muchos años del sector que solicita más facilidades a la hora de constituir y de dar cumplimiento a las obligaciones», afirmó Soumoulou.











