El histórico dirigente mercedino Ariel Ayello será proclamado nuevo presidente de la Sociedad Rural Río Quinto durante una asamblea programada para el 25 de junio próximo, según lo anunció el titular saliente, Sergio Herrera, durante el acto por el 115º aniversario de la fundación de la entidad.
Quienes impulsan su candidatura consideran que el perfil combativo del dirigente cubrirá la coincidente demanda de los productores, que reclaman entidades más activas frente al poder político de turno.
El triunfo de Claudio Poggi despierta algo de expectativas en el sector, que lo recibió la primera semana de mayo y donde Gustavo del Bosco, vicepresidente 1º de la Confederación de Asociaciones Rurales de la Tercera Zona (CARTEZ) le entregó un documento elaborado desde las entidades que integran CARTEZ, donde se detallan las prioridades de una “política agropecuaria adaptada para nuestra provincia”.
Pero también han puesto foco en quienes resultarán electos senadores y diputados nacionales por San Luis en octubre próximo.
En un encuentro previo a las elecciones del 11 de junio, la conducción de la rural villamercedina recibió también al candidato a gobernador derrotado Jorge Fernández. Fue una reunión tirante e incómoda para el “Gato”, porque le plantearon su abierta oposición a la postulación de su compañera de fórmula, la senadora Eugenia Catalfamo, que pocos días antes de oficializar su candidatura buscó despegarse del kirchnerismo, al que acompañó en los tres primeros años de su mandato.
Los ruralistas no olvidan sus votaciones contra los intereses de San Luis, como la ley que modificó los cupos de corte con biocombustibles, anteriormente apoyada en la Cámara Baja por el diputado nacional albertista Carlos Ponce y sus pares adolfistas Karim Alume y Victoria Rosso.
Ponce también está en falta porque como integrante de la Comisión de Agricultura de la Cámara de Diputados nunca buscó tomar contacto con las entidades de San Luis para conocer las necesidades del sector.
Esa ley, que salió tras un abierto lobby de YPF impulsado por el kirchnerismo, puso en riesgo más de 600 puestos de trabajo que proporcionan las plantas de biodiesel y bioetanol radicadas en San Luis y Villa Mercedes.
Con la misma desconfianza miran la posible candidatura a la reelección del senador Adolfo Rodríguez Saá porque tampoco defendió a la industria puntana en esa oportunidad y por sus estrechos vínculos con la vicepresidente Cristina Fernández, quien le pediría que represente a su espacio con su nueva postulación para la Cámara Alta.











