En el marco de la Convocatoria 2018 del programa de Fortalecimiento de Escuelas que lleva a cabo la Fundación Carlos Díaz Vélez comenzaron las actividades de dos proyectos que cuentan como referentes a técnicos de la AER Concarán.
Uno de los proyectos aprobados se denomina «Nuestra salud en armonía con el medioambiente natural:armado de invernáculo con manejo de técnicas agroecológicas», que tiene como destinatarios a la la comunidad y alumnos de la escuela N°223 “Granadero Juan Manuel Pringles” en el paraje Los Lobos a cargo del Ariel Risso, técnico extensionista de INTA.
La meta en este proyecto es lograr la construcción de un invernadero tipo túnel para la producción de hortalizas, aromáticas y flores con fines didácticos, y principalmente abastecer al paraje con dichos productos.
“A partir de esta articulación con el cuerpo docente de la escuela N °223 “Granadero Juan Manuel Pringles” en el paraje Los Lobos integrado por la directora Graciela Edith Sosa y las profesoras Maricel Sánchez y Ana Lilian Pollini, surge la propuesta de formular un proyecto con la finalidad de ampliar la producción bajo cubierta mediante los fondos donados por la Fundación Díaz Vélez” explicó Ariel Risso.
El otro proyecto se denomina “Elementos para huerta y productos manufacturados” y corresponde a la escuela N° 221 “Irma Romero de Pacheco”, de Cerro de Oro, Merlo. Esta iniciativa fue llevada a cabo por su directora Mónica Beatriz Romero, los profesores Gastón Peña y Federico Vázquez y tiene como referente por INTA a la extensionista Flavia Quevedo.
Este proyecto incluye el agregado de valor, “se prevé entre otras actividades, la construcción de un desecador solar para realizar pruebas de secado con hortalizas y plantas aromáticas y la adquisición de un extractor de aceites esenciales para obtener aceites de aromáticas y la elaboración de diferentes productos”.
Si bien se viene trabajando desde la AER Concarán desde hace más de 5 años junto a estas Instituciones educativas, hoy redoblan la apuesta con estos nuevos proyectos.
“A través de estos proyectos se busca, continuar con el trabajo que se viene ejecutando junto a la AER Concarán y el programa ProHuerta, de esa manera reforzar lo ya logrado”, comentaron ambos técnicos.
Fundación Carlos Díaz Vélez
Don Carlos Díaz Vélez nació en la ciudad de Buenos Aires en el año 1861. Fue un destacado hombre de campo, estanciero, filántropo, juez de paz e ingeniero cuya incesante actividad creadora lo llevó a realizar diversos proyectos. Era un amante de la naturaleza.
Su pasión por los árboles lo llevó a plantar miles de ejemplares en una superficie de 500 has. a fin de fijar los médanos costeros de sus campos de Necochea. El actual Parque Lillo es su herencia.
El nacimiento de la Fundación Carlos Díaz Vélez se encuentra en el cumplimiento de la voluntad testamentaria de Mathilde Díaz Vélez (Patina) hija de Carlos, quien dispuso a sus herederos el fomento de la educación agrícola ganadera, a la que consideró de fundamental importancia para el crecimiento de nuestro país.
Foto: Prensa INTA San Luis.











