La Agencia de Extensión Rural (AER) de INTA Villa Mercedes fue retirada del nuevo organigrama enviado por la conducción del organismo nacional. Su personal será absorbido por la Estación Experimental que funciona en la misma ciudad y, en principio, su actividad deberá reconvertirse.
La información fue confirmada a El Semiárido por el director interino de la Estación Experimental Agropecuaria (EEA) de INTA San Luis, Ricardo Sager, quien explicó cuáles serán las modificaciones que habrá en la provincia, a la luz de la hasta ahora única información recibida que consiste en una propuesta de organigrama, sin explicaciones complementarias que puedan aclarar situaciones que no están debidamente aclaradas.
En los ámbitos internos de INTA y en los externos que están relacionados con la organización, además del periodismo agropecuario que interactúa en forma cotidiana, estos últimos días estuvieron marcados por la ansiedad propia por conocer información oficial sobre cuáles serán las modificaciones anunciadas a través de declaraciones del presidente Juan Balbín y votadas en la reunión del Consejo directivo de INTA nacional.
Sager reconoció que la información que se fue conociendo por los medios masivos de comunicación causó malestar en el personal de INTA dado que se carecía de precisiones oficiales. El lunes recién recibieron una «propuesta de modificaciones estructurales» que abarca a todo el país y donde está incluida la provincia de San Luis.
Provisto de esos datos el director se reunió con el personal el miércoles en horas de la mañana en el salón que la EEA tiene en Villa Mercedes y vía teleconferencia con los integrantes de las Agencias de Extensión Rural que hay en la provincia: San Luis, Concarán, Quines y Unión.
A través de la información que llegó vía «paper digital» se confirmó lo que había trascendido por los medios. «La Agencia de Extensión Rural de Villa Mercedes desaparece como unidad operativa de la estructura y será absorbida por la Estación Experimental», afirmó Sager.
Aclaró que por ahora (el «por ahora» corresponde a quien esto escribe) «no afecta para nada al personal en cuanto a salarios, empleo, rangos profesionales».
Admitió que esa medida «afecta la identidad de los extensionistas», dado que INTA se ha conformado y tanto su personal cuanto los productores conocen que a través de la historia que se escribió lleva el sello de dos componentes: la investigación y la extensión, «cada uno con sus capacidades y tirando en yunta».
¿Por qué se pierde la identidad? porque los profesionales que se proponen que sean absorbidos por la experimental pasarán a integrar equipos de investigación, es decir deberán reacomodarse y asimilarse a un perfil muy diferente del que fueron formados.
Sager tiene una dilatada trayectoria en INTA. Este año cumple 40 años en la institución. «He pasado por varias situaciones críticas. Debo decir que esta es la más parecida a la que vivimos en los años ’90 (durante la presidencia de Carlos Menem), cuando se dio la misma situación, es decir la AER Villa Mercedes fue cerrada», recordó.
Desde su análisis, «nunca una Experimental de investigación puede contener al personal de extensión».
Como el presidente de INTA Juan Balbín se encargó de decir por los medios de comunicación que las decisiones se deben dejar de tomar en Buenos Aires para que pasen a decidir las provincias cómo se debe realizar el trabajo, el grupo de San Luis elaboró una contrapropuesta desde su territorialidad.
Previo a dar a conocer la propuesta enviada hay que aclarar que INTA tiene en San Luis una agencia virtual en buena Esperanza, que está atendida desde Villa Mercedes; también se había previsto una segunda en la localidad de San Martín, pero no pudo establecerse. No obstante, a esta última también la tienen registrada como tal desde Buenos Aires y era mantenida en la estructura.
Con la premisa de planificar el trabajo desde el territorio se envió a Buenos Aires la propuesta que consiste en sostener la Agencia de Villa Mercedes dado que la más cercana hacia el norte es San Luis, a cien kilómetros, y hacia el sur está en Unión, a 250 kilómetros. Es decir, quedaría una gran porción del territorio provincial sin atender las necesidades de los productores.
Además, como la Agencia de San Martín no está funcionando, pero sí se contempla en el organigrama reformado, la de Villa Mercedes pasaría a suplir a esa agencia.
Sager es optimista que la contrapropuesta enviada sea aprobada por la conducción de INTA. «No pensamos en opción B», sostuvo.
Hay algunos aspectos que no tienen aclaración. Como el caso de que deban asimilar el personal de Extensión al área de investigación. ¿Quién hará el contacto directo con los productores? ¿Cómo hacer para ensamblar a un personal que está formado para una matriz de extensión con otro que es investigador? ¿Dónde queda la identidad de los profesionales?
Preguntas que sólo el tiempo y la planificación que tienen en la cabeza los conductores nacionales de INTA tienen la respuesta. Mientras, en las Experimentales y las agencias de extensión del interior del país reina un mar de incertidumbre. Esto recién empieza…
Producción: El Semiárido
