Con algo menos que lo obtenido el año pasado por razones climáticas, la finca La Buena Fe, ubicada en el ingreso a Candelaria, se encamina a obtener un promedio de mil kilos de almendras por hectárea.
Con cien hectáreas pobladas con 30 mil plantas de la variedad Guara, es la plantación más grande de la provincia y la cosecha se anticipó algunas semanas por las condiciones climáticas. Las cuadrillas de operarios trabajan desde la semana pasada y los primeros rindes arrojan 22 kilos de fruto sin pelar por planta.
La recolección se extenderá durante un mes y medio. Este es el séptimo año de producción de la explotación que pertenece a la firma Agrozira SA, propiedad del empresario español Juan Herrera Martínez Campos.
Oscar Jara es el responsable de hacer cumplir las estrictas tareas técnicas de mantenimiento establecidas para todas las estaciones del año. “En Candelaria se le saca la primera cáscara y se le hace un secado previo para después enviarlas a Mendoza, donde la firma Aceitera General Dehesa las pela y devuelve separada por tamaño en cajas de 10 kilos envasadas al vacío para comercializarlas en el demandante mercado nacional”, le contó a Todo Un País.
En el mercado argentino, la bolsa de 10 kilos de almendra entera pelada y seleccionada cotiza entre $130.000 y $200.000.
Jara hace doce años que está a cargo de la finca, que tiene 2.100 hectáreas, con diez círculos de 136 hectáreas cada uno con riego por pivote, alimentados por una perforación que arroja 280 mil litros por hora con agua de muy buena calidad. La papa sobresale entre las producciones desarrolladas.
“Este año tenemos un poco menos producción que el año pasado, ya que el 18 de diciembre tuvimos una manga de piedras que tiró mucho fruto al suelo, lo que nos adelantó la recolección; por suerte tenemos una buena cantidad de calibre 6, que es el tamaño comercial”, explicó Jara.
Las de menor tamaño y las partidas durante el proceso de pelado se venden igual, ya que las panaderías y rotiserías las utilizan para la elaboración de confituras.



El equipo de riego de los almendros está todo automatizado, con cuatro válvulas que se abren por turnos y de manera autónoma.
El establecimiento La Buena Fe brinda un importante empleo temporario. Los dos primeros años las cosechas se hicieron en forma manual, con el empleo de 90 personas de la zona. En 2023 comenzaron con la recolección a máquina y un repaso liviano a mano con 50 operarios.
Una máquina que saca la primera cáscara de la almendra fue traída desde España e instalada en la finca: «Hay tanta demanda que se vende muy rápido».
Las plantas las compraron en San Martín y Tunuyán, Mendoza, aunque no consiguieron la cantidad que buscaban, ya que el proyecto inicial contemplaba la plantación de almendros en 700 hectáreas.
De todos modos, Agrozira desarrolla en un laboratorio instalado en Santiago del Estero el cultivo in vitro de variedades de almendras para conseguir ejemplares que se adapten bien a Candelaria y que escapen a las heladas tardías.
La Buena Fe comenzó en 2017 con la plantación de almendros tras acogerse a la Ley de Promoción a la Fruticultura Provincial (NºVIII-0666-2009) destinada a pequeños y medianos productores y que contempla un reintegro de hasta el 80% de la inversión realizada y a los dos años de logrado el monte frutal.
Agrozira también desarrolla una inversión productiva en Santa Rosa, La Pampa, donde realiza cría bovina y búfalos para la producción de leche.
Todo Un País.
Fotos: Gentileza de Oscar Jara.











