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Vendimia con poco para festejar

El consumo local de vino cayó a 18 litros pér cápita en 2018 y está en su piso histórico.

Este fin de semana comienza la Fiesta de la Vendimia, pero el sector vitivinícola no tiene mucho para festejar. Las bodegas y fábricas de mosto registradas exportan el 20% de lo que producen, mientras venden el 80% al mercado interno. El consumo local cayó a 18 litros pér cápita en 2018 y está en su piso histórico, dos litros menos que en 2017. Lejos de los 90 litros que se consumían en la década el ´70.

Los bodegueros insisten en que necesitan volver a enamorar a los consumidores. Reconocen que el avance de la cerveza es muy preocupante. No es lo mismo competir contra un producto concentrado en muy pocas manos, casi en dos gigantes, que tiene un gran poder publicitario y por el otro lado 1208 bodegas. Si bien existen intentos aislados de bodegas líderes, lo logrado con la campaña genérica de vino suma, pero no alcanza.

El consumo local cayó un 5,95% en 2018, según datos del Instituto Nacional de Vitivinicultura e impactó en una caída a niveles históricos. La baja no se detiene ni muestra señales de recuperación. Basta recordar que apenas cuatro años atrás, el consumo pér cápita era de 24 y en 2018 cerró en 2018.

Una de las pocas noticias que festejarán en la Vendimia es que consiguieron que el Senado mendocino apruebe la ley que crea un fondo anticíclico para la vitivinicultura. «Contar con $800 millones anuales para actuar sobre situaciones extremas, ya sea por faltante de vino o por exceso, no soluciona los problemas, pero ayuda», explica Walter Bressia, presidente de Bodegas Argentinas. Si bien consiguieron la otorgación de bonos fiscales a las exportaciones, quieren que se extiendan a los vinos fraccionados.

Un grave problema son los excedentes. «Tenemos un excedente de 300 millones de litros y estamos trabajando con las cámaras y el Gobierno para tratar de sacar del mercado la mayor cantidad posible de vino para que no siga presionando sobre el precio», dijo Bressia al diario mendocino Los Andes. Algunos aseguran que la importación de vinos chilenos causó el sobre stock, Bressia lo niega y asegura que si no entraban hubieran tenido problemas sociales importantes como despidos o plantas cerradas.

En 2018, las exportaciones crecieron levemente en valor un 2% y en volumen un 23%. Las bodegas exportaron poco más de 88 millones de litros de vino a granel con una suba del 184%, lo que representó una suba del 47% en los ingresos. El valor promedio del litro de vino argentino cayó a u$s 2,98, es decir bajó un 18%, en relación a los u$s3,63 en los que promedió en 2017. La exportación de vino en botella cayó un 3% en volumen y un 1% en facturación.

Los cinco primeros destinos a donde se exportó el vino argentino fueron Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Brasil y Países Bajos. China que aparece en el sexto puesto del ranking creció un 10% en volumen, pero en valor fue el mismo que 2017.

En esta Vendimia, sigue latente el reclamo de la industria: la devolución de las retenciones a las exportaciones y acuerdos internacionales.

Fuente: BAE Negocios