Varios de los de los estudios del instituto público privado IPCVA demuestran que los argentinos sólo dejamos de comer carne cuando no tenemos el dinero suficiente para comprarla. En el mes de marzo del presente año, el consumo de carne por habitante en el país fue de 46 kg/hab/año, llegando a un mínimo histórico para nuestras mesas.
Debido a este contexto y en el marco de los nuevos anuncios que realizó el gobierno nacional para paliar la crisis que golpea al pueblo, éste ha recurrido a los “Programas de Alimentos” que tanto había criticado y también había dicho eliminarlos.
En lo que respecta a la carne, se anunció el “Cortes de carne a precios accesibles”, en donde en un acuerdo público-privado se pone a un precio diferenciado 120 mil kg de carne semanales. Para tener una idea de cuánto representa ese total, en el mes de marzo (según datos de CICCRA) en el país se consumieron 172 mil “toneladas” en el mercado interno por lo que lo ofrecido por el gobierno en su gran programa representa apenas un 0,29% de lo consumido, 10 gramos de carne por habitante al mes.
Igual que en el 2017, el gobierno de Macri toma medidas de tipo electoral que sólo sirven para vender en las noticias, sin resolver los problemas de fondo de quienes producen y quienes consumen, con decisiones que no mejoran en lo más mínimo los costos productivos, ni el poder adquisitivo de las y los trabajadores. Parece que para los habitantes del país de las vacas “No solo las Pascuas serán sin carne”.
Centro de Estudios Agrarios – CANPO – Abril 2019
