Construido entre 1938 y 1941, el dique San Felipe, ubicado en el departamento San Martín, es uno de los favoritos por los pescadores que lo visitan regularmente, desde los puntos más dispares.
A 138 kilómetros al noreste de la capital sanluiseña, el embalse San Felipe desprende toda su belleza y espacio de esparcimiento. Ubicado en la cuenca de Conlara en las cercanías de Renca, posee una cuenca hidrológica de aporte de 1.130 kilómetros cuadrados y una capacidad de riego de 13.000 hectáreas.
Desde el dique nace el canal matriz Renca- Santa Rosa, que abastece los sistemas de riego de San Pablo, Tilisarao, Concarán y Santa Rosa del Conlara. Posee 47.152 metros de longitud en toda su extensión y está totalmente revestido.
Esta presa es uno de los espejos de agua más emblemáticos de la provincia, con una superficie de 128 hectáreas y una capacidad de embalse de 81 hectómetros cúbicos. El uso principal que se le otorga a este embalse es el abastecimiento de agua para la población, riego, ganadería, generación de energía hidroeléctrica y uso recreativo con la práctica de actividades náuticas, turísticas y deportivas, como la pesca.
Su pintoresco marco natural, potencia el gran desarrollo turístico de la zona con una destacada oferta de clubes, campings y servicios gastronómicos. Los pescadores de San Luis y de provincias vecinas, encuentran un espacio propicio para realizar este tipo de actividad de modo regular, con variedad de peces que aporta la presa.
Foto: Prensa San Luis Agua.
