Con una inversión estatal de 50 millones de pesos, comenzaron las obras para recuperar los caudales perdidos por evaporación o infiltración del Río Atuel, en la provincia de Mendoza, cuya cuenca está en emergencia hídrica por sexto año consecutivo.
El superintendente de Irrigación de Mendoza, José Luis Álvarez, junto al intendente de General Alvear, Juan Carlos De Polo, y regantes de ese departamento, dieron inicio a las obras que rectificarán el cauce del río dentro de 18 meses.
Se realizarán obras de rectificación en distintos puntos del cauce comprendidos en los 70km del tramo superior del Atuel entre la Ruta 40 y el Embalse el Nihuil. Los trabajos buscan recuperar un volumen de agua de 5 metros cúbicos por segundo, lo que equivale a la capacidad de retención del embalse Valle Grande. El sistema hídrico en esta zona presenta pérdidas de hasta el 25 %, haciéndose más intensivas en la zona de La Junta.
Mientras tanto, en la Corte Suprema de Justicia de la Nación se tramita una demana que La Pampa le inició hace 65 años a Mendoza porque avanzó sobre un río interprovincial como el Atuel, provocando con el paso del tiempo un fuerte impacto ambiental negativo, la desaparición de humedales y un éxodo poblacional que aún está presente entre el puñado de pampeanos que habita en la zona.
Según una nota publicada hoy por el diario económico digital Ecocuyo, que no menciona el conflicto con La Pampa, el 28 de mayo comenzaron con los primeros 15 km de rectificación de cauces y llevará unos 60 días su concreción. Aclaró también que los tiempos de finalización están calculados en 18 meses y dependerán, especialmente, de las condiciones climáticas, ya que las bajas temperaturas congelan las maquinarias, la acumulación de nieve y algunas zonas con excesiva humedad pueden impedir el acceso a distintos puntos del río dependiendo la época del año.
Lalo Rico, inspector de cauce de General Alvear, considera como importante las obra que se iniciaron, ya que les permitirá a acceder a más agua en las próximas temporadas y recordó que “el deterioro de este recurso se hace muy notorio cuando se producen altas temperaturas”.
Cómo se hará la serie de obras
Las obras proyectadas comprende el encauzamiento y rectificación de distintas partes del río con el objeto de disminuir cauces secundarios y meandros o curvas, concentrando el caudal en cursos principales.
Se trata de movimientos de suelos en el mismo lecho del río (no hay impermeabilización), trabajos que se harán bajo la forma de obra por administración y se calcula un costo aproximado de $50 millones de pesos. Será llevada adelante por Irrigación, Infraestructura y Vialidad.
Las obras serán encaradas en distintas etapas y buscan recuperar un volumen de agua de 5 metros cúbicos por segundo; lo que equivale a la capacidad de retención del embalse Valle Grande.
El sistema del río Atuel superior por sus condiciones hidrográficas sufre una pérdida en su caudal de hasta el 25 % por infiltración y evaporación.
En la zona de El Sosneado, a la altura de la ruta 40, el Río Atuel irrumpe formando un extenso abanico aluvional, y continúa con dirección hacia el sudeste (hasta llegar al Nihuil), formando varios brazos, antes de recibir aguas de su principal afluente: el Río Salado.
Los múltiples brazos y curvas de los cauces, son el principal motivo de la pérdida de agua en la zona por infiltración o evaporación. Lo que significa menor capacidad de riego para la producción. Estas obras se presentan como una oportunidad para sostener la producción agrícola y la garantía de riego a productores de la cuenca del río Atuel.
La cuenca del río Atuel se encuentra en emergencia hídrica por sexto año consecutivo y, al igual que en distintas partes del mundo, las variaciones del clima se hacen sentir en la región. A partir de este escenario, el Departamento General de Irrigación ha definido estratégicamente las obras que contrarrestarán las consecuencias de las emergencias hídricas, como lo son las contempladas en el Plan para la Recuperación de Caudales en Atuel.
