No son caminos secundarios ni vecinales, son rutas provinciales que acumulan un largo abandono del estado puntano. Se trata de la ruta 40, en el tramo que une la Autopista 55 con la localidad de Papagayos, y la ruta 48, entre La Maroma y Nueva Constitución. Ambas complican a los pobladores rurales, pero también traban el movimiento de producciones agropecuarias.
La situación más grave, por lo menos hasta donde se conoce por boca de los productores, se presenta en el extremo sudoeste de la provincia, donde los ganaderos están desesperados porque tienen hacienda inmovilizada. Ya son menos los camiones que quieren entrar a sus campos si no van acompañados por un tractor de gran porte, escasos en el sur, porque es habitual que queden enterrados en médano que domina la ruta.
El director de la desguazada Vialidad provincial les prometió hace pocos días a los ganaderos del sudoeste de San Luis que la reparación de la ruta 48 se incluirá en el presupuesto del año próximo. Nadie le creyó. Se cumplieron cinco años de agotadores reclamos para mejorar esa vía clave que es muy utilizada para transportar hacienda, según recordó a El Semiárido Mirta Bava, ganadera del esa zona del Departamento Dupuy.
Dupuy, el departamento más ganadero de una amplia región del país. No se conoce ningún reclamo encabezado por legisladores de allí. En el árido sudoeste provincial, el crónico abandono de la ruta 48 mantiene una cantidad no determinada, pero importante de hacienda inmovilizada. Cada vez menos transportistas quieren entrar a los campos y menos vecinos dejan pasar por sus predios para esquivar esa ruta, que une las poblaciones de La Maroma, Martín de Loyola, El Porvenir y Nueva Constitución con la ruta nacional 188.
En el Valle del Conlara, también crecen las voces de protesta por la ausencia de mantenimiento de la ruta 40, que une la AU 55 con Papagayos, donde las complicaciones mayores las soportan los empleados de los campos, ya que al haber varios poblados cercanos en la zona muchos asisten a trabajar diariamente con sus motos o autos de viejos modelos y en mal estado.
El productor y asesor agronómico de la zona Macelo Bongiovanni publica habitualmente fotos en su página de Facebook que muestran el pésimo estado de los caminos rurales, agravado recientemente con la salida de las cosechas.
El mantenimiento de rutas y caminos de uso agropecuario es uno de los mayores déficits que deja la gestión de Claudio Poggi. En cuatro años, sólo Inauguró los dos últimos tramos asaltados de la ruta 11, una obra resuelta y presupuestada durante la gobernación de Alberto Rodríguez Saá; la ruta 14, el tramo Justo Daract- límite con Córdoba y lo que le faltaba de la ruta 3, ente Nahuel Mapá y Zanjitas, que lo inauguró en el último tramo de su gestión.
Sólo en el norte de San Luis prendió la buena propuesta que les hizo Poggi a las sociedades rurales para que armaran consorcios camineros y con ello reemplazar la tarea que no podía cumplir el vaciado parque automotor de Vialidad provincial.
Esto quedó en evidencia después del aluvión de problemas que llegaron tras las inundaciones del 1 de marzo. El gobierno debió acudir desesperado a las empresas privadas para que es alquilaran sus máquinas. Lo mismo, la reparaciones de los caminos en el norte y en la zona de influencia de Santa Rosa del Conlara y detrás de Concarán fueron muy superficiales.
FOTO: Marcelo Bongovanni
