El gobierno de Mendoza, a través de la Dirección de Agricultura y Contingencias Climáticas, anunció que creció un 20% el porcentaje de productores adheridos al Seguro Agrícola provincial para la temporada 2019-2020. Según informaron, el Seguro Agrícola brindará cobertura a 4.464 productores mendocinos en la campaña 2019-2020, unas 755 propiedades rurales más que las 3709 de la temporada anterior.
Por tercer año consecutivo, este servicio estará a cargo de un grupo de empresas del rubro contratadas por la Provincia. Esta vinculación público-privada permite incrementar las indemnizaciones por daños y cumplir de manera efectiva los plazos de los pagos.
La implementación de seguros agrícolas es importante en cultivos que requieren de inversiones elevadas; en Mendoza es el caso de los tomates, duraznos o vid para consumo en fresco o industria vitivinícola. Según indican datos de la Dirección de Agricultura y Contingencias Climáticas (DACC), cerca de 2000 productores mendocinos sufren los deterioros climáticos en sus cosechas anuales (en algunos casos, pérdidas mayores al 50%) a partir de heladas tardías y granizos.
En esta temporada, el Seguro Agrícola abonará compensaciones de $20.000 por hectáreas para los productores de vid y/o frutales que tengan pérdidas del 100% en la producción. En tanto, los productores de hortalizas, maíz y forrajeras cobrarán $3.900 por hectárea dañada al 100%. En la temporada 2018-2019, el Seguro desembolsó un total de $125 millones en indemnizaciones por daños.
Cabe aclarar además del Seguro Agrícola Mendoza dispone de un Fondo Compensador Agrícola que se activa en caso de contingencias climáticas, destinado a productores con una extensión de más de 20 hectáreas. Las compensaciones en este caso alcanzan a quienes sufran daños superiores al 50%.
El surgimiento del Fondo Compensador Agrícola es un sistema universal (de carácter obligatorio) en el que todos los productores realizan aportes mínimos para beneficiar a aquellos que se ven damnificados por heladas y granizos.
Este aporte se realiza a partir de la base cultivada de cada productor. Su carácter universal brinda la posibilidad de garantizar compensaciones al 12% de los productores con menor nivel de capitalización, para que puedan cubrir los costos productivos del nuevo ciclo sin trasladar las consecuencias del siniestro en la próxima cosecha.
Fuente: Revista InterNos
