En un establecimiento agropecuario ubicado en la zona de Villa Mercedes, técnicos de la Subsecretaría de Agricultura Familiar (SsAF) y de INTA junto con productores están desarrollando una experiencia para alimentación de cerdas gestantes con pasturas forrajeras y restricción de consumo de concentrados.
Se trata de la siembra de dos pasturas de verano, sorgo forrajero y moha, que sirven de alimento a las cerdas gestantes. La experiencia se medirá en el intervalo de aproximadamente 90 días
La alimentación de los reproductores porcinos incide en forma importante en los costos de producción de lechones. Una de las categorías de interés para disminuir estos costos es la cerda gestante, por sus menores requerimientos nutricionales. Para ello, se reduce el consumo de concentrados y se sustituye con pasturas cultivadas.
El objetivo principal de este trabajo es compilar información para determinar el consumo y la utilización de forraje, el aporte de éste para la dieta y el número de cerdas capaces de manejar por superficie de pastoreo.
Intenta sentar las bases para comenzar a trabajar en otros aspectos relativos a sistemas pastoriles en la cría de cerdos (producción de lechones), tales como presupuestación forrajera, especies forrajeras para utilizar, carga animal, nivel de restricción de consumo de concentrado en gestación y/o en lactancia.
El proyecto está coordinado por el técnico de la Subsecretaría de Agricultura Familiar de la Nación Adrián Bianchi. Este organismo cuenta con la coordinación provincial de Marcos Gatica.
El técnico de INTA Hugo Bernasconi trabaja Junto con Bianchi en la experiencia de alimentación de cerdas gestantes.
En cuanto a la restricción de concentrado se procura bajar los costos que implica alimentar, por ejemplo, con maíz, cuyo valor en este momento tiene una alta incidencia.
En el establecimiento agropecuario “La Cordobesa”, ubicada en el periurbano de la ciudad de Villa Mercedes, provincia de San Luis, se implantó una superficie total de 1,5 hectáreas, pertenecientes a productores de la Agricultura Familiar que realizan la cría porcina como una de sus actividades pecuarias.
Para la siembra del sorgo forrajero y la moha se utilizó labranza convencional. La fecha de siembra fue el 27 de diciembre de 2017 y el pastoreo se inició en febrero. Se realiza un pastoreo directo de 2 a 3 horas diarias en momentos del día donde los índices UV son bajos; por ejemplo, al atardecer.
Para registrar el consumo de concentrado durante la experiencia, disponibilidad de forraje, utilización y comportamiento de las distintas especies forrajeras, carga animal, condición corporal de las cerdas, entre otros puntos, se completan planillas.
Una vez finalizada la experiencia se confeccionará un informe a modo de conclusión final. Esto ocurrirá al terminar el pastoreo en el mes de abril.
Fotos: Prensa SsAF San Luis.
