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Comenzaron los trabajos para mejorar corrales de cabras en la zona de Bajo de Veliz

Recibidos los materiales, los productores de la agricultura familiar de la zona comprendida entre Santa Rosa del Conlara y Bajo de Véliz comenzaron a construir los refugios necesarios para la protección de las cabras en esta época invernal.

Técnicos de la Subsecretaría de Agricultura Familiar de la Nación efectuaron un recorrido por diferentes establecimientos para asesorar y observar cómo se están realizando las obras.

Durante el mes de junio se realizó la entrega de materiales a los productores. Éstos consistieron en ladrillos, tirantes, chapas y cemento.

Corral de Licho Zapata

Con un camión hicieron el recorrido campo por campo, donde dejaron los elementos acordados previamente con sus pobladores. En total fueron entregados 11.500 ladrillos block, 500 chapas, 910 tirantes y 167 bolsas de cemento. Ahora es el momento de la construcción de los corrales.

Estos trabajos forman parte de un desembolso de Aportes No Reintegrables (ANR) de un proyecto correspondiente al Régimen para la Recuperación, Fomento y Desarrollo de la Actividad Caprina, que asciende a un millón 200 mil pesos. En el proyecto están contemplados 70 productores.

En una primera recorrida, los técnicos visitaron varios establecimientos donde se están realizando los trabajos. Entre otros, estuvieron en los predios de Cristina Miranda en Bajo de Veliz; Juan Alvelo y Licho Zapata, de Los Lobos; Tomasa Jara de Los Quebrachos y Mónica Ponce, de Los Argüellos.

Corral de Mónica Ponce.

Para poder conocer las necesidades de los campesinos de la zona comprendida entre Santa Rosa y el Bajo de Veliz se tuvo que hacer un trabajo fino para determinar cuáles eran las carencias comunes que atravesaban a la mayor parte de los productores.

Esa tarea estuvo a cargo de técnicos de la Secretaría de Agricultura Familiar, Coordinación y Desarrollo Territorial de la Nación, que en forma conjunta con otros pares de INTA, Senasa, Ministerio del Campo y Universidad Católica de Cuyo, coordinaron las acciones para planificar y redactar el proyecto.

No obstante, antes de sentarse a redactarlo fueron necesarias muchas horas de reuniones y articular actividades con el conjunto de los productores hasta que se le pudo dar forma.

Corral de Tomasa Jara.

La historia comenzó unos cuatro años atrás, cuando iniciaron las reuniones de la Mesa Caprina en la zona del Conlara. “A partir de un par de parajes que están más consolidados en la organización de la comunidad se dio la posibilidad de sumar fuerzas para la producción del sector caprino”, apunta el técnico de la Subsecretaría de Agricultura Familiar Leonardo Janjetic.

Fotos: Prensa SAF San Luis