Jornada agitada la del lunes 7 de septiembre en la provincia de San Luis. El corte del acceso a la provincia en La Punilla fue inesperado, lo cual obligó a las organizaciones relacionadas con la actividad agropecuaria a mantener intensas reuniones, escritos de documentos y, fundamental, tomar posición ante la decisión de los productores del lado de Córdoba.
Cuando la noche se aproximaba, Javier Quiroga Contreras, el abogado del Consorcio Caminero de Achiras e integrante de la interinstitucional denominada «Trabajadores Autoconvocados de la producción de Alimentos» del sur de la provincia de Córdoba, confirmó a El Semiárido que se proseguirá con el corte de la ruta 30 a la altura de La Punilla y que se abre un compás de espera para que el gobierno de San Luis elabore una respuesta o formule propuesta ante el reclamo.
«Prolongamos el corte de ruta hasta el miércoles. Si no tenemos respuesta realizaremos una nueva asamblea para ver cuál es la medida de fuerza que sigue», afirmó el letrado. Si bien no especificó cuál es el camino, en la asamblea realizada el domingo la propuesta había sido ampliar el corte a la ruta siete, en el ingreso a San Luis por la localidad de Justo Daract.
Hoy lunes se reunieron aproximadamente 50 productores a la altura del corte de ruta en La Punilla. Después de debatir durante un rato, se decidió continuar el corte y abrir el compás de espera.
El gobierno de la provincia de San Luis hasta las 20.30 no emitió comunicado ni opinión alguna en torno del tema. Si bien se esperaba que hubiese alguna reacción por parte del Ejecutivo, el modo elegido fue el silencio.
Los que no mantuvieron silencio fueron los productores agropecuarios agrupados en diferentes sociedades rurales de San Luis, asociaciones, además de políticos que emitieron su opinión.
De estos últimos, el propio hermano del gobernador, el senador Adolfo Rodríguez Saá acompañado por intendentes, diputados nacionales y provinciales emitieron un documento en el cual advierten que al «monólogo» del gobierno se suma la «posibilidad de quedar desabastecidos, sin víveres, medicamentos y elementos esenciales para nuestra gente, en plena pandemia, frente a la disputa de sectores productivos de la provincia de Córdoba».
Tras sostener que como puntanos «no vamos a claudicar ante la extorsión de quienes pretenden avasallar a nuestra provincia», exigen al gobernador Alberto Rodríguez Saá que «administre la crisis con la efectividad que el modelo San Luis ha patentado hace años y hoy se desdibuja».
La Sociedad Rural de San Luis expresó formalmente este lunes a través de un comunicado de prensa que no comparte los cortes de ruta dispuestos por productores autoconvocados por considerar que “son inconducentes” y que esas acciones “significan escupir al cielo”.
De todos modos, volvió a exigir al gobierno de San Luis que modifique los protocolos para las personas vinculadas a la actividad agropecuaria y que necesitan entrar o salir de la provincia. “El Ministerio de Producción, que opta por no atender los problemas del sector, debe dejar de mirar para otro lado”, insistió.
«Las restricciones impuestas por el gobierno de San Luis son un claro ejemplo de cómo se avasallan los derechos», expresa la Confederación de Asociaciones Rurales de la Tercera Zona (CARTEZ) al referirse a las restricciones de los pasos provinciales para ingresar en la provincia de San Luis.
La queja de la entidad de segundo grado presidida por Javier Rotondo involucra a los productores agropecuarios y a los ciudadanos que viven en las zonas limítrofes, que necesitan moverse de una lugar a otro entre las provincias.
La Corriente Agraria, Nacional y Popular (CANPO) junto al Frente Productivo expresaron su apoyo a los controles y los protocolos implementados por el gobierno de Alberto Rodríguez Saá para prevenir los contagios de la enfermedad COVID-19.
El sector más humilde de la producción agropecuaria, conformado por pequeños productores y productores de la agricultura familiar, sumados a las pequeñas industrias salieron al cruce de los productores agrupados en las sociedades rurales del sur de Córdoba.
Sostienen que los controles «son necesarios», dado que quedó demostrado que «nos permiten tener un status sanitario que conlleva que tengamos mayor libertad para desarrollar nuestra producción».
Por su parte, la Confederación Rural de San Luis insistió ante el gobierno por cambios en los protocolos.
“Lo mejor para San Luis y su gente es trabajar en conjunto para llegar a buen puerto”, expresó al pedir al gobierno provincial la participación del sector al momento de planificar estrategias sanitarias que afectan al sector y reiteró su pedido para que se “revean y agilicen” los protocolos para facilitar el ingreso de productores a la provincia.
A estas voces se sumaron audios y escritos provenientes de productores de General Alvear de la provincia de Mendoza, que daban cuenta de que el miércoles tomarían medidas contra San Luis, aunque a última hora no se pudo confirmar la información.
Las expectativas están puestas en la respuesta que dará el gobierno de la provincia de San Luis. Los ojos direccionan hacia el Ministerio de Producción y hacia el propio gobernador.
Hay muchos caminos que están cerrados, aún el de la Justicia. Las esperanzas están depositadas en una negociación que de una vez logre destrabar el problema fronterizo, que causa daños económicos, familiares, laborales, además de la existencia de algunos sectores que radicalizan la protesta y la direccionan hacia horizontes a los que los argentinos no queremos volver.
Producción: El Semiárido
